martes, 19 de febrero de 2013
jueves, 14 de febrero de 2013
BARRANCABERMEJA Y SU HISTORIA
¿POR
QUÉ CONMEMORAR LOS 90 AÑOS DE LA USO?
Por: Rafael
Antonio Velásquez Rodríguez. Investigador
independiente y docente de la Institución Educativa El Castillo en las áreas de
Ciencias Sociales y Filosofía, Barrancabermeja.
Es la misión histórica de la clase trabajadora hacer desaparecer el
capitalismo. Raúl Eduardo Mahecha
Caycedo. Vanguardia Obrera. Barrancabermeja, 1924.
El presente artículo pretende hacer una reflexión sobre el nacimiento de
la USO y su importancia histórica, para lo cual se tomo como referencia
fundamental, el texto titulado “Fundación de la Sociedad Unión Obrera”, escrito
por el historiador Renán Vega Cantor y otros, en el libro Petróleo y protesta obrera. La USO y los trabajadores petroleros en
Colombia. Tomo 1: En tiempos de la Tropical.
Antecedentes.
Cuando se firmó la Concesión de Mares en 1906 hasta su traspaso
fraudulento a la Tropical Oil Company en 1919, para la explotación del
petróleo, Barrancabermeja sólo era un pequeño corregimiento de San Vicente de
Chucurí, pero en la década de 1920 se convirtió en municipio y se constituyó en
la segunda ciudad del Departamento de Santander. La riqueza del subsuelo por el
oro negro-petróleo, permitió que en este territorio se implantara un enclave
petrolero durante 35 años.
A principios del siglo XX, el pequeño puerto de Barrancabermeja estaba
habitado por unas cien personas, mientras que en San Vicente de Chucurí vivían
alrededor de mil. En 1907, tenía 415 habitantes, en 1919 ya eran 1450 y en
1927, se calculaba que en el Centro de Barrancabermeja vivían 5000 trabajadores
y 200 estadounidenses, de un total de 12.000 habitantes que tenía el municipio.
La creación de la Tropical Oil Company (Troco) permitió un nutrido proceso de migración,
en el que fueron enganchados muchos obreros que provenían de las sabanas de
Bolívar, Sucre, Córdoba, también oleadas de antioqueños y de santandereanos,
que se adaptaron al clima y los duros trabajos requeridos para iniciar la
explotación del petróleo, como los hacheros y macheteros trabajando como peones.
Entre los años de 1919 y 1922, la Troco para enganchar a los
trabajadores les prometía lo divino y lo humano, pero los obreros se
decepcionaban muy rápido al ver que las promesas no coincidían con la realidad:
No existía un adecuado aprovisionamiento de agua potable para el consumo
humano, pues no había plantas de tratamiento ni acueducto; las circunstancias
de trabajo tampoco eran atractivas, ya que los obreros laboraban en extensas
jornadas de 10 y 12 horas, de lunes a sábado, recibiendo muy mala alimentación,
además eran alojados en campamentos inadecuados, sin ningún tipo de servicio
sanitario ni de protección que impidiera la entrada de mosquitos, las
condiciones higiénicas de las habitaciones en donde debían pernoctar los
trabajadores no eran dignas (situación igual o peor viven los obreros hoy en
Puerto Gaitán a manos de Pacific Rubiales).
Sin embargo, a pesar de las denuncias de prensa sobre las lamentables
condiciones de trabajo de los obreros petroleros la Troco, con engaños en uno
de sus argumentos afirmaba que las difíciles situaciones de trabajo y de vida
de la población obrera estaban compensadas por los salarios que pagaba, “nominalmente
los mejores del país”, y se escudaba en esta premisa para negarse a asumir las
demandas obreras de mejorar las condiciones de trabajo y aumentar los salarios.
Fundación de la Sociedad Unión Obreros 10 de febrero de 1923 - Hoy USO.
Por los antecedentes mencionados arriba sobre las condiciones laborales
y de vida indignas imperantes en el naciente enclave petrolero de la Tropical, generó
las primeras protestas de los trabajadores, que en un principio fueron
espontáneas, individuales y desorganizadas. Por eso es importante entender las
razones objetivas y subjetivas, que explican la aparición de una organización
sindical en el seno del enclave petrolero de Barrancabermeja.
Entre los factores objetivos se encontraban las pésimas condiciones
materiales de vida y de trabajo que tenían que soportar los trabajadores como
jornadas extenuantes, pésima alimentación, falta de hospitales, servicios
médicos y el mal trato a que eran
sometidos por los capataces, en su gran mayoría coterráneos. Los factores
subjetivos, hicieron posible una embrionaria conciencia de clase, la cual sólo
se adquiere y se consolida mediante la lucha contra la explotación y la
opresión de manera organizada.
Estos factores objetivos y subjetivos permitieron, a pesar de todas las
dificultades que hubo el 10 de
febrero de 1923, que se fundara en la clandestinidad La Unión Obrera o
La Unión Obreros, los nombres originarios de la Unión Sindical Obrera (USO).
A orillas de la quebrada La Putana se reunió la primera junta directiva
de la Unión Obrera. Fueron los dirigentes socialistas Manuel Francisco
Hernández, José María Blanco, Pedro Sosa, Dionisio Vera, Juan F. Moreno, Víctor
Pájaro, Alfredo Campos y Rozo Carrascal, quienes declararon fundada la Sociedad
Unión Obreros y distribuyendo los cargos directivos. El primer presidente de la
Sociedad Unión Obreros, su denominación original, fue E. Sánchez Sanmiguel y
como Secretario General fue escogido Raúl Eduardo Mahecha. Si bien, el documento
fue emitido el 12 de febrero, es necesario aclarar que la reunión clandestina
inaugural se llevó a cabo el día 10 de febrero de 1923 (véase anexo de la copia
de carta original).
Es importante señalar que el papel del
Secretario General Raúl Eduardo Mahecha
Caycedo (1884 Guamo-Tolima – 1940 Barrio Olaya-Bogotá), en el interior del
sindicato fue el nervio de la embrionaria
organización de trabajadores, su promotor y constructor. Por eso, desde septiembre
de 1922, en Barrancabermeja se presentó un cambio significativo en las
condiciones de organización y de lucha de los trabajadores petroleros, cuando
llegó a la región el curtido líder obrero y popular Mahecha, con experiencia
combativa en diversos lugares del país y en especial en los puertos del río
Magdalena.
Mahecha, cuando llegó al puerto arrendó un
cuarto en una de las desvencijadas casas de la población y allí empezó a
ofrecer sus servicios como abogado, anunciando que sólo cobraba “honorarios
para favorecer a los obreros”. A la vez, comenzó a prepararlos espiritualmente,
fundando el periódico Vanguardia Obrera
que editaba por medio de una imprenta volante de su propiedad. En esta prensa
se empezó a denunciar las iniquidades de la compañía y las desastrosas
condiciones de vida de la población obrera. Fueron lemas del periódico: “Las libertades no se piden, se toman”; “Trabajo o revolución social” y “Es la misión histórica de la clase
trabajadora hacer desaparecer el capitalismo”, frases éstas que siguen siendo
vigentes en la actualidad y en especial, para que la clase trabajadora siga
luchando.
Por sus permanentes denuncias, la asesoría
que les proporcionaba a los obreros y su entrega en las labores organizativas,
soportó la calumnia por parte de la Troco que siempre lo calificó como un ex
presidiario que no merecía ser escuchado. A medida que el trabajo organizativo
de Mahecha cosechaba frutos, siendo el más importante la fundación de la Unión
Obrera, la compañía estadounidense empezó a presionar al gobierno para que lo
persiguiera. Aquél tuvo que soportar amenazas, multas, luego prisión y
ostracismo tras las huelgas de 1924 y 1927.
La labor de Mahecha en Barrancabermeja le
dio dignidad y autoestima al obrero colombiano, haciéndole comprender que era un
creador de riqueza cuyo trabajo beneficiaba a la Troco. Esta autoestima
adquiría un carácter de reivindicación nacional ante la explotación a la que el
imperialismo estadounidense sometía al país y a sus habitantes. Él fue el
dirigente indiscutido del movimiento obrero en la zona petrolera de
Barrancabermeja en la década de 1920, una de sus acciones más resonantes fue su
bandera de lucha: La reivindicación de los tres ochos (8 horas de trabajo, 8 horas de descanso y 8 horas de estudio) como
símbolo en las dos primeras huelgas de 1924 y 1927, época en que fue
encarcelado en dos oportunidades, en la primera permaneció 13 meses preso y en
la segunda, junto a los principales organizadores fueron detenidos y llevados
después a Tunja, donde se les torturó, sometiéndolos al terrible suplicio del
cepo. A comienzos de 1928, se fue para Ciénaga a continuar un nuevo combate
contra la United Fruit Company, para ayudar a organizar la huelga de finales de
1928.
La historia de la fundación de la USO, las
luchas obreras, campesinas, populares y de los pueblos afrodescendientes e
indígenas, son invisibilizadas. En los textos escolares se cuenta la historia
oficial, pero es tarea y compromiso del movimiento sindical y obrero, persistir
en la recuperación de la memoria histórica desde los de abajo. Los 90 años de lucha, se constituyen en
un referente y oportunidad única para repensar, reivindicar y dignificar, el
valioso legado aportado por los luchadores sociales, que son muchos y muchas
desconocidos (as), que esperan dignamente ser estudiados.
CONSIGNAS DE LA ÉPOCA
¡UNA
OFENSA HECHA A UN OBRERO, ES UNA OFENSA HECHA A TODOS!
¡VIVA
LA REVOLUCIÓN SOCIAL! ¡VIVA COLOMBIA! ¡VIVA EL OBRERISMO!
¡TRABAJADORES,
HACIA PUERTO WILCHES! ¡NO MÁS CADENAS DE LA TROPICAL!
¡PROLETARIOS
DE TODOS LOS PAÍSES, UNÍOS!
¡EL
OBRERISMO LUCHA POR LOS DESCAMISADOS, LOS INDEFENSOS Y HARAPOSOS!
miércoles, 6 de febrero de 2013
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Seguidores
Datos personales
- Gloria Bayona
- Colombia